Audaz y Preciso

ND — La primera cosa que nos preguntamos fue cómo podíamos crear un nuevo tipo de mueble tapizado, algo que fuera a cubrir una brecha, un faltante en el mercado. Queríamos diseñar para Arper algo que quedara bien en ambientes tanto residenciales como de trabajo, también porque estos dos mundos, en términos de cómo se ven y se sienten, se están acercando cada vez más.

JL — Es la parte más excitante de nuestro trabajo: unir mundos y tratar de crear un híbrido entre universos diferentes. Otro aspecto importante era la necesidad de abordar seriamente el tema de la sostenibilidad. Arper es una empresa muy comprometida en ese sentido, quiere crear productos que realmente estén pensados teniendo eso en cuenta. Por eso, desde el punto de vista del diseño, nos pusimos a pensar qué habría pasado con el sofá de Arper una vez concluido su ciclo de vida útil. ¿Cómo se habrían reciclado los componentes? ¿Cómo se habrían separado los materiales durante el reciclaje? Debíamos hacer el producto pensando al revés… diseñar en modo sostenible es desafiante para la industria del diseño en su conjunto, porque potencialmente todo lo que nos rodea debe ser repensado… y hay oportunidades increíbles para crear innovación.

ND — Al principio, lo que nos quedó claro de inmediato fue que no debíamos diseñar una pieza única, sino un sistema. Desde el punto de vista constructivo nos preguntamos cómo podíamos crear un sistema cuyos componentes pudieran separarse fácilmente. Al mismo tiempo, debíamos pensar en la identidad del producto, las características que queríamos infundirle, como sensualidad, tactilidad, suavidad, que normalmente se asocian al ámbito doméstico... Es muy subjetivo el modo de brindar identidad a un mueble, a fin de que exprese mejor los valores de Arper y se adapte a espacios híbridos.

JL —  Lo interesante de Arper es que tiene una identidad visual muy reconocible que, de acuerdo a nuestra percepción, es muy lineal y nítida, como un bonito traje a medida... pero nosotros, como estudio, también tenemos nuestra propia expresión visual personal. El desafío era, entonces, conjugar nuestro estilo con algo que encontrara su lugar en el mundo de Arper. Los productos de Arper son muy ligeros, así que debíamos crear un sofá que reflejara esa sensación de ligereza, como si flotara o se deslizara sobre el suelo.

ND — Exacto…nos encantó especialmente el desafío de jugar con el contraste entre la identidad decidida y clara de Arper y la necesidad de crear un mueble suavemente confortable. Lo logramos reuniendo una armazón envolvente, que le da forma al sofá, y suaves cojines para acoger y ofrecer máxima comodidad.

ND — Comenzamos por realizar un modelo para establecer algunos principios básicos. Personalmente, al principio del proceso tiendo a centrarme más en el dibujo para entender cuál podría ser la sensación de un diseño, mientras que Jonathan trabaja de forma mucho más práctica, haciendo una maqueta o jugando con los materiales. Desde el principio intentamos pensar en cómo hacer un sofá que, una vez creado, no dejara percibir que estaba formado por componentes separados.

JL — Estoy convencido de que el dibujo puede llevarte lejos en el diseño de un producto, pero para comprender realmente cómo se comportarán las superficies y los materiales, es necesario trabajar con algo físico lo antes posible, una maqueta. Es un proceso que utilizamos mucho en el estudio para definir la forma, usando tanto telas como otros materiales. Es como dibujar en tres dimensiones... puedes registrar la tensión del material mientras pliegas el papel o estiras la tela sobre un volumen de espuma... observar y tomar nota de qué sucede durante el proceso.

JL — La modularidad permite insertar el sofá en diferentes contextos, así como en espacios de trabajo que, dados los cambios actuales en el modo en que trabajan las personas, están incorporando cada vez más suavidad y comodidad en el diseño de interiores. Hemos notado que hay una gran necesidad de variedad y diversidad en el ambiente de trabajo, sobre todo después de la pandemia.

ND — Todas las piezas que componen un sistema modular deberían ser igualmente deseables. Las configuraciones modulares deben existir por sí mismas, pero sin definir completamente la identidad del diseño. Por eso, aunque nuestro diseño empezó como un sistema, para nosotros era crucial que cada componente de ese sistema funcionara igual de bien como mueble por sí mismo, con la suficiente belleza y elegancia como para convertirse en objeto de deseo.

El estudio Doshi Levien ha sido fundado por los diseñadores Nipa Doshi y Jonathan Levien, que se conocieron en el Royal College of Art. El estudio, con sede en Londres, es famoso a nivel internacional por su combinación de cultura y tecnología, diseño industrial y artesanía.

La combinación de búsqueda, materialidad y tactilidad en su proceso de diseño - pintura, escultura, coloración - se traduce en un trabajo que se distingue por la claridad de las ideas y la atención en el detalle.